POTRILLOS CON CASCOS SANOS
Articulo de Marjorie Smith (USA)
Los
potrillos nacen con sus pequeños cascos perfectos. Si se le
entregan las condiciones similares a las que tienen los caballos
salvajes, sus cascos y patas se desarrollaran sin problemas. Pero la
mayoría de los potrillos que nacen en cautiverio viven en
condiciones bastante distintas a lo que sus cascos necesitan.
Aparentemente
la primera hora de vida del potrillo es crucial para la salud del
casco. En su ambiente salvaje, la yegua hace que el potrillo se
mueva rápidamente del lugar donde nació, debido a que
los predadores se sienten atraídos por el olor después
de la parición y por supuesto que también por el
potrillo. Por lo que los cascos blandos del potrillo, que
básicamente consisten de tejido irregular de ranilla y con
muchos nervios sensoriales (que informan al cerebro de una
posición
coja), tienen al menos una hora de movimiento en terrenos duros antes
de ser amamantados por la madre. Gene Ovnicek cree que esa hora de
movimiento es “la ventana de la oportunidad” que permite
al casco comenzar hacia una forma y función correcta.
Para
poder desarrollar cascos sanos, los potrillos no deberían
estar en camas blandas desde el día 1 y deberían
caminar a lo menos 15 kilómetros o más al día.
Esto también beneficiará
a la yegua ya que caminará
lo necesario para una buena salud de ella y de sus cascos
Los
cascos de los potrillos son casi cilíndricos al nacer. Les
toma bastante contusión en terreno duro para que los cascos se
ensanchen y así poder tener la forma cónica para
absorber el impacto de los caballos adultos. Al hacerlos pisar en
terrenos blandos, el casco sólo se entierra y no se flecta.
Muchos
potrillos entonces desarrollan un casco muy contraído
cuya base es más pequeña que el rodete coronario. Esto
hace que sea muy difícil descontraerlos.
Los
potrillos corren con la manada en terrenos rocosos y duros desde el
día 1. Los caballos salvajes se mueven alrededor de 30
kilómetros al día, para comer y tomar agua. Los
potrillos son precoses, lo que significa que ellos nacen teniendo la
capacidad de seguir a la manada.
La
alineación del hueso depende de tener el suficiente movimiento
en terreno firme. Nacen con las cuartillas casi verticales. Ellos
necesitan de mucho movimiento para que los huesos de las cuartillas
se alineen en una curva armónica lo que les dará la
absorción necesaria del impacto para la pierna.
Los
ligamentos y los tendones de las patas, como también de la
parte alta del cuerpo, se fortificarán sólo con el
trabajo de cada día. Los ligamentos y tendones firmes
provienen del movimiento diario en terrenos duros y rocosos. Un
caballo criado en esas condiciones podrá manejar sin fallar,
todos los requerimientos físicos exigidos por la
equitación.
La
Dr. Strasser advierte que el “problema” con que algunos
potrillos nacen en las patas se alinearán por si solos
correctamente en dos semanas, sin la intervención del
veterinario, si el potrillo tiene el movimiento suficiente y si no es
mantenido en un terreno blando.
Aquí
vemos un casco de una mano derecha de una potranca de 6 semanas. Ella
está libre las 24 horas, pero el terreno es blando, por
lo que sus cascos no se desgastan lo suficiente. El “después”
es parecido a como sus cascos estaban cuando nació.
Antes del despalme Depués del despalme | Suela, depués del despalme |
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=639977769381158&set=a.290338114345127.66938.290334764345462&type=1&theater
ResponderEliminar